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La esquizofrenia es un constructo clínico heterogéneo sin anomalías biológicas características de sus presentaciones o capaces de segregar en ellas grupos de utilidad científica y clínica, como la predicción de la respuesta al tratamiento o evolución y la identificación de factores etiológicos. Sin embargo, puede asumirse con seguridad que (al menos) en muchos pacientes hay una disfunción cerebral subyacente a los síntomas que forman ese constructo clínico. En este sentido, las técnicas funcionales de estudio de sus sustratos cerebrales, en el contexto de otros datos biológicos y clínicos, representan una oportunidad de identificar ese sustrato. No obstante, es muy posible que no exista un sustrato único para la esquizofrenia sino más bien coincidan en ese síndrome clínico diversos cuadros biológicamente diferenciables.
Al finalizar el curso el alumno debe:
- Comprender los fundamentos de las principales técnicas funcionales para el estudio de los sustratos cerebrales en la esquizofrenia.
- Comprender el problema planteado por la marcada heterogeneidad clínica y biológica de este trastorno para llegar a identificar sus sustratos cerebrales.
- Conocer los nuevos métodos de análisis de la función cerebral global basados en la teoría de grafos y los hallazgos recientes derivados.
- Conocer las posibilidades que estas técnicas pueden ofrecer en la actualidad y posiblemente en un futuro cercano en el estudio clínico de pacientes individuales.
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